Y siiii! nos dieron muchas ganas de salir de Paris a devorarnos una de las regiones más foodies del planeta: la Borgoña francesa y nuestra primera parada en su capital, Dijón, la ciudad de la famosa mostaza. Luego, adentrarnos en lo profundo de la provincia para vivir la experiencia en un spa de montaña espectacular en la localidad de Saulieu! Ay ay ay chicas! cuántos placeres se nos dan viajando! o no? y más si te animás a experimentar cosas nuevas y más si como nosotras te pasa que de repente te invitan a un programa de la tv francesa a filmar! jajaja, ya les voy a contar!!
SALIR DE PARÍS
Cuando tenés varios días en París y tal vez no es tu primera experiencia en Francia, está bueno dedicar al menos uno o dos días a explorar las afueras, salirte del molde, conocer lugares no tan tradicionales y que van más allá del Castillo de Versalles, animarte a subirte a un auto con amigas y la música bien alta o a un tren que en 2 horas te deja en un cuento medieval de mounstros y princesas y el paladar en éxtasis con la comida y los vinos más exquisitos del mundo.
Pensá que Francia entera tiene el tamaño de la Provincia de Buenos Aires, no! es más pequeña todavía. Así que en pocas horas andando, aparecés nadando en el Mediterráneo o en los Alpes limitando con Suiza, o Italia, o esquiando en la alta montaña, o en medio de la campiña con los mejores viñedos y paisajes.
Nos habían hablado tanto de Dijón, su gente, sus sabores que decidimos venir a conocerla.
#CHICASENDIJON
Creímos que lo mejor era llegar por tren (1.45h aprox) desde el centro de París pero atenti. Este es un país que en el último tiempo está viviendo algunos líos sindicales con el transporte. Te suena ésto? siii! chicas! en Francia también existen problemas con los gremios y puede pasar que haya PARO, esto significa que antes de sacar tu pasaje de tren chequees si hay chances de que el sindicato programe un paro, porque cuando lo hace, son 2 o 3 días enteros sin transporte y esto puede afectar tu viaje. Para evitar este rollo? lo mejor! alquilar auto.
Nosotras decidimos alquilar en @hertz (gestionamos todo online y terminamos de ultimar detalles en la suc. cercana a nuestro depto de París: Porte Maillot) hay autos a partir de los €30 x día pero luego tenés que tener en cuenta gastos adicionales, por ej. tamaño de baúl para que entren todas las valijas, cant. de personas que viajan, nosotras queríamos uno automático (que en Europa es una rareza) así que eso costó un upgrade importante, luego le adicionamos los seguros, la nafta, la hora de la devolución, etc. Así que tenés que tener en cuenta que hay otros gastos para considerar además de la tarifa.
Una vez que tenés el auto solo queda agarrar la A6 desde París, elegir la música y animarte a vivir la experiencia rutera más hermosa de tu viaje! Una auténtica road movie de chicas, tuvimos que aprender a cargar nafta solas, a asignar roles ruteros, conductora designada y copilota, a hacernos chiquititas y meter todas las valijas en modo tetris una y otra vez hasta que entraron y bueno, por supuesto, a intentar no perdernos en el camino y si eso sucede tan solo disfrutar. Estamos en Francia, puede haber algo para no sonreir? Nada.
Salimos a la mañana bien temprano, buscamos el auto, Kari al volante y ahora, la ruta es nuestra! en 2.50h estabamos estacionando en Dijón un domingo. Acá hay un dato importante: las ciudades no son lo mismo un día de semana, un sábado que un domingo. Por lo general en Europa los domingos todo cierra, la gente descansa, los estudiantes se van a sus casas fuera de la ciudad y solo queda una paz que sobrevuela todo y se puede sentir un aroma a siesta eterna, por eso «caer» en domingo en una ciudad hace que todo sea diferente. Si querés ver la ciudad en su escenario y «ruido» habitual lo mejor es que elijas un día de semana, pero si querés disfrutar un Brunch en Dijón (como queríamos nosotras) lo único que podés hacer es venir domingo. Así que al llegar, nos encontramos con una ciudad algo fantasma, tan medieval como un cuento y donde podíamos caminar casi a solas por entre las callecitas angostas y soñadas y sentir una paz liviana en el aire que nos mimaba y nos hacía sentir ahora sí, en un hermoso pueblito de Francia, nada parecido al bullicio parisino. Y lo mejor, es que casi la mitad de su población son estudiantes! porque tiene una de las universidades más prestigiosas de Francia así que atenti! Chicas solteras vale muuuucho la pena una pasadita por Dijón JAJAJA (en días de semana porque los findes se van) .
BRUNCH EN DIJON
Preguntando a los locales, como siempre cuando viajo, nos habían contado de un brunch muy famoso y que es el corazón de la ciudad y solo funciona en domingo así que teníamos que venir a probarloooo! Se llama Le Brunch des Halles de Dijon y es una experiencia foodie alucinante pero ojo! solo funciona entre los meses de junio y septiembre (ay veranito europeo qué lindo sos!) de 11 a 15h y todos los domingos hay un chef famoso a cargo cada vez.
Tenés que reservar tu sitio por la web (cuesta €25 c/u) y al llegar, hay grandes mesas puestas muy a la francesa, con mantelito de colores, alrededor de los puestos del gran mercado de comidas y allí solo vale sentarte a no parar de desgustar. No vale venir sin hambre o a dieta! te seducen los quesos, la decoración de las mesas, la gente, los panes, el señor Chef que viene a saludarte y contarte en su francés dijonnaise sus mejores recomendaciones, y vos no sabés por donde empezar.
Acá estamos meta brindis!
Vale probar todo. La bebida , si es con alcohol, la tenés que pagar aparte. Y lo que no debés perderte para nada es la creme de cassis, un kir dulce riquísimo típico del lugar como lo es la mostaza, ideal para aperitivo o a la hora de los postres. Nosotras embalamos y trajimos unas cuantas botellitas para casa! 😛
Para las que amamos comer y disfrutar en cualquier parte del mundo, este Brunch es un gran placer, compartir la mesa con los locales otro tanto, vale hablar el idioma del amor (si no entendes nada de francés como yo), la mayoría son franceses, muchos parisinos que vienen a pasar el día o turistas de otros países europeos, la comida en ésta región del país es muy prestigiosa, los caracoles, el famoso bœuf Bourguignon (vino y la carne de res), los panes especiados, es definitivamente una región foodie y hay que venir con ánimos de devorarla!
Nos acercamos a despedirnos del chef del Brunch (este día estaba a cargo el famoso Eric Briones) y con la panza llena (gordis nosotras?) salimos a explorar la ciudad, es divina porque es chiquita y contenedora, en un día la recorrés más que perfecta. Un datazo acá es que si no tenés idea por donde empezar mires hacia el piso, sí! vas a ver uno buho o lechuza (animal representativo de la ciudad «chauette«) que señaliza con marcas esculpidas en bronce por dónde hacer el mejor recorrido histórico y no perderte nada. La ciudad parece un gran store de Ladurée, o no? jajaja
Así que lo que tenés que hacer es «seguir el camino del Buho«. Y cuando lo encuentres (lado norte de la Iglesia Notre Dame) tenés que acercarte a tocarlo con la mano izquierda y pedir un deseo porque trae suerte! La parte histórica es toda peatonal chicas no hay semáforos ni autos, un placer caminarla, un viaje en el tiempo real!
Los imperdibles un día en Dijón son:
-Ver la locación de la peli Cyrano de Bergerac, es una casa de té de fines del 1400 Maison Milliere donde se filmó la peli y su fachada de estilo es divina. Mirá, estoy sentada acá igual que Gérard Depardieu. Qué tul?
-Curiosear la iglesia Notre Dame (sí sí, se llama como la de París) es del 1200! y son impresionantes sus gárgolas góticas, son más de 50 y me dieron un poco de miedo te voy a confesar. En lo alto de la torre hay un reloj campanario con cuatro muñequitos de metal «Jacquemart y Jacqueline» que marcan cada hora con un martillo sobre el campanario y los otros dos «Jacquelinet y Jacquelinette» (los hijos) golpean cada 1/4 de hora sobre una pequeña campana. Después también caminando cerquita está la Catedral.
–No hay Dijon sin mostaza así que a degustar y comprar chicas!!! atenti que algunas variedades pican fuerte! Nos encantó el local La Moutarderie Fallot, una de las marcas boutique de la ciudad.
-Ver el Palacio de los Duques de Borgoña.
-Subir a la Torre Philipe Le Bon que es del año 1400 y son 300 escalones, clase de step😅a full y vistas 360 de la ciudad tremendas al atardecer! y cuando estés arriba ponete a mirar los techos de las mansiones de la ciudad, allí es donde vivían las familias de la aristocracia y se mantienen como en aquella época, tienen la técnica de vernissage, multicolores, un espectáculo para viajar a través del tiempo y te preguntás, donde tienen los aires acondicionados y donde cuelgan la ropa? Nooo! parece que estuvieras en otra dimensión del tiempo! Surreal.
-Si sos muy fanática foodie agendá venir en el mes de noviembre que es la Feria Internacional de la Gastronomía y lleva casi 100 años de tradición. Y como no podía ser de otra manera, en Dijón hay restorantes muy prestigiosos y varios con 2 estrellas Michelin, como sabés, en Francia los chef se disputan con honor este título. Así que si querés vivir esta experiencia verdaderamente dijonnaise agendá conocer:
• William Frachot – Hostellerie du Chapeau Rouge (**)
• Stéphane Derbord – Restaurant Stéphane Derbord (*)
• Angelo Ferrigno – La maison des Cariatides (*)
• Dominique Loiseau – Loiseau des Ducs (*)
• Nicolas Isnard et David Le Comte – Auberge de la Charme à Prenois (*)
Y cuando ya te diste una panzada de abadías y castillos, infinitas calles de piedra tremendamente medievales, alguna experiencia foodie con estrellas, es hora de arrancar camino a la zona de viñedos, las opciones más recomendables son: Marsannay-la-Côte, Gevrey-Chambertin o Nuits-Saint-Georges y obvio asignar conductor responsable! porque no son compatibles conducir y beber jajaja y sino, podés hacer una horita más de auto, despedirte de Dijón, atravesar las colinas más verdes y perfectas hacia el lado de los Alpes y llegar hasta un spa deluxe en La Borgoña y relajar al infinito. Como hicimos nosotras.
BERNARD LOISEAU´S HOTEL & SPA
Saulieu – Cote D´Or
Francia tiene ese no se qué tan elegante y chic, restoranes de tremendo prestigio internacional, lujo extremo e intentar salir de lo vulgar y ordinario siempre fue EL sello francés. Esa necesidad de destacarse de lo común, y cuando decís eso es muy francés, te referís precisamente a eso que es dificil de describir, que no es regular, ni clásico, sino algo con muchísimo estilo (y algo barroco también). Cuando hablamos de moda, Francia es “Haute Couture” (Alta Costura), Dior, Yves Saint Laurent y miles de referentes de todas las épocas. En gastronomía, Michelín y sus estrellas que es el prestigio más buscado y también una competencia feroz entre firmas locales.
Vos te preguntarás qué tiene que ver ésto con la Borgoña? Bueno… resulta que precisamente es en esta región donde manda la «excelencia francesa» y donde fuimos invitadas por la TV5 (el canal más importante de la teve del país) a participar de un programa que sería filmado en el hotel-spa más prestigioso del lugar, cuya dueña es Dominique, viuda de uno de los chef más famosos de Francia y que junto a sus hijos decidió continuar el legado maravilloso de su esposo, en un espacio de pura salud y placer in-cre-í-ble.

Acá mandan los sentidos y la estética y estamos siendo las protagonistas de esta belleza sin que todavía podamos creerlo, un programa de tele en Francia!??? whatttt? (como suele pasarme mucho desde que empezó esta locura de Chicas en New York, acá estoy sumando otra anécdota rarísima que no olvidarés jajajaj y una de esas que también me demuestran que #Nadaesimposible).
Te cuento más de la historia de este lugar para que sientas un poquito lo que nosotras estamos viviendo acá y ahora… Dominique nos cuenta que aquí viven su historia, su familia y con el equipo que armó (donde también es directora y pieza clave la joven Bèrangére, su hija divina que nos recibió con sonrisas eternas) siguen con pasión y amor uno de los legados más reconocidos de Francia «Bernard Loiseau» , sello de autenticidad, cordialidad y excelencia.
Saileu es una pequeña localidad donde comunmente los viajeros que atravesaban Francia de norte a sur o al revés (desde los romanos hasta la modernidad), hacían una parada como «a mitad de camino» por eso la D906 es una ruta muy turística. Y acá estamos. Nos dan unas batas marrones mullidas preciosas, atravesamos un jardín repleto de rosas y aromas de verdad increíbles y nos dirigimos al spa, estamos por vivir una de las experiencias más sublimes del viaje.
El spa «Villa Loiseau des Sens» es nuevo nuevísimo recién estrenado y es so-ña-do!! ok, a relajar y entregarnos a vivir la experiencia mientras nos siguen las cámaras! ay chicas! jajaja, todavía no termino de acostumbrarme a ésto.
Yo me formé para estar del otro lado y ahora chan! me siguen las cámaras y un micrófono peludo a donde voy. Calma. Vamos a gozar todo este lugar chicas!
El lugar es super cálido, discreto y no saben la sensación de esta chimenea en este cuarto privado que nos prepararon. A pesar de estar en un show de tv, sentimos la paz y la buena vibra del lugar, será que estamos entre amigas, gozando cada segundo la maravilla que es estar acá.
Por la ventana miro hacia los jardines, está nublado, hay pájaros que cantan y algunos huéspedes que caminan contemplando, hay perros, uno gigante enorme! el hotel es súper pet friendly. Me llaman para unos masajes y ahí les pido un favor, mitad filmamos mitad quiero mis masajes reales! jajaja, tan solo un ratito, me entrego a relajar y ay ay ay, es la mejor parte de cualquier viaje: los mimos!
Hora de almorzar, nos esperan en el Restó del spa a cargo del chef Shori Ito, un japonés que se inspira en la cocina francesa y crea con intuición, frescura y sabores que nos atraviesa todos los sentidos. Nos siguen mimando como loco chicas!
Por la tarde nos toca conocer la piscina. Todo diseñado hipermoderno y nuevisimo. La combinación de la vida que más nos gusta a las mujeres, salud y placer chicas!

Estamos viviendo una experiencia única, rejuveneciendo a cada segundo de spa chicas! Por la noche siguió otro momento deluxe. Cena de pasos en el restó del lugar que nos deleita con 2 estrellas Michelin!!! Gastronomía maravillosa y un lujazo para las que amamos los detalles, la calidad, la tradición, el buen vivir y el pan con manteca jajaja, chicas no saben lo que es la manteca en este país! Y en este instante era tanta la gratitud y el hambre! que apagué el celular y en vez de sacar 100 fotos a los platos, nos dedicamos a degustar. Perdón chicas ustedes me entienden. Las mesas hiper elegantes, dan al jardín de rosas del lugar y se inicia una especie de ceremonia. Estilo haute couture pero en el paladar! Luego agotadas nos fuimos a dormir. Extasiadas con esta invitación exquisita, hasta el otro día que tocaba seguir filmando y la mala: partir.
Cuando terminamos el recorrido por el hotel, inundadas de un aroma a rosas hermoso, tocó la hora de armar valijas y despedirnos. Los viajes son así, son maravillosos pero tienen un final. Nos abrazamos con Dominique y Bèrangeré con un a bientot y un Vive la Bourgogne! Sabiendo que quizás no sea pronto, pero que volveremos a esta tierra de ricos vinos y quesos, finísimos placeres y nuevas amigas. Felices de haber podido estar acá en lo que es el sueño de una gran familia francesa en la región, pero más, un sueño de grandes mujeres continuando un legadode amor.
Si te enamoraste del lugar como nosotras y querés conocer Bernard Loiseau, agendá estos tips:
-Toda la data y tarifas del hotel en http://www.bernard-loiseau.com/fr/. Como ya te dijimos, es de altísimo nivel así que tené en cuenta que el precio es de medio para arriba.
-Podés vivir la experiencia del spa Loiseau des Sens aunque no te hospedes, por el día te cuesta €45 y si estás hospedada €20.-
-Almorzar en el restó del spá Loiseau des Sens, el menú «Market Fresh» te cuesta €32, entrada, plato principal, y postre.
-Si no viajás a la Bourgogne y querés vivir otra experiencia culinaria famosísima de la familia, podés hacerlo en el restó Loiseau Rive Gauche de París a cargo del chef Maxime Laurenson.
-Si todavía no entendiste en qué parte de Francia estamos,jajajaj, acá te dejo un mapa.
Si querés conocer todo lo que hicimos en París no dejes de leer la nota #ChicasenParís.